¿Alguna vez has sentido la desilusión de descubrir la verdad?
Sí es así, sabes ¿Por qué?
Por que la verdad te duele, porque la verdad te puede, porque la verdad hay que aceptarla, tal y como es.
Hay quien busca lo que quiere, sé quien soy, sé que doy y sé que me dan, esa es mi verdad no necesito mas verdad, pero cuando me dan una verdad dolorosa, ya no sé donde estoy, ni quien soy, ni como estoy.
Pero la vida no es llorar y hacer notar de que estás triste, la vida es todo lo contrario, porque en el futuro te enfrentarás a cosas muchisimo más duras.
El sentimiento puede contigo, caerás en todas las trampas del amor, es otra gran verdad, pero no es una desilusión, en cambio no, hoy no, no te adentrarás en el mundo de los sueños, aún no, es de día, a la noche nos aventuraremos en una aventura que jamás habrás soñado
En nuestra vida siempre para todo, tenemos una oportunidad, tenemos una base, una base de la cual tienes que partir, no puedo construir una casa si no tengo el piso, empieza por abajo y nunca por arriba.
Pero, acaso ustedes no se han parado a pensar, ¿Qué pasa después de la primera oportunidad?, ¿Hay segundas oportunidades?.
Debemos de ser consientes de que si tenemos las oportunidades, es porque la vida nos ha puesto ese plato, y como buen plato de comida, hay que aprovecharla, porque si desaprovechamos las oportunidades, pasaremos días sólos, comiéndonos la cabeza, buscando soluciones a lo que no lo tiene.
Pero¿ Y si tuvieras una segunda oportunidad? ¿La aprovecharías?
